Fitness sostenible

El fitness sostenible es una mentalidad, no un programa. La mentalidad correcta es la diferencia entre alcanzar tus objetivos y perseguirlos constantemente. Es algo que se puede practicar en cualquier etapa de la vida, a cualquier edad y en cualquier nivel de forma física.

Un estado físico sostenible no se consigue de la noche a la mañana y tampoco se trata de obtener resultados en seis semanas.

Es un proceso lento y constante que no se produce de la noche a la mañana. Es razonable y puede mantenerse en el tiempo. Son ejercicios que puedes seguir y obtener resultados duraderos.

Esto significa trabajar duro, pero de forma inteligente, este enfoque no significa que no puedas tener unos músculos abdominales fuertes que no puedan desgarrarse o rasgarse.

Todo lo contrario, porque un enfoque duradero funciona si te ciñes al programa. Cualquier programa que prometa resultados rápidos es probablemente demasiado bueno para ser verdad.

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¿A la mayoría de nosotros nos gustaría perder 20 kilos en 40 días?

Por supuesto, la cuestión aquí es, ¿qué pasa después de 40 días? Los programas que hacen falsas promesas pueden llevar al agotamiento o a las lesiones.

Si el programa dice ser una locura, entonces probablemente lo sea. Descubrir lo que funciona para ti es un proceso, pero el esfuerzo vale la pena. Una vez que lo hayas descubierto, el potencial para alcanzar tus objetivos aumenta exponencialmente.

Decálogo sostenible

La constancia es la clave para encontrar una forma física sostenible

Si intentas mantener un ritmo que no te deje tiempo para todo lo demás en tu vida, será casi imposible de mantener. Mantén un horario que se adapte a tu estilo de vida. Una vez que lo encuentres, haz lo posible por cumplirlo.

Espera altibajos y baches en el camino

No dejes que los “días de descanso” o los “entrenamientos perdidos” se interpongan en tu camino.

A largo plazo, la trayectoria será ascendente si te ciñes a un plan consistente en lugar de una solución rápida. Puede sonar aburrido, pero la constancia es el camino del éxito. Si te pierdes un entrenamiento, no intentes compensarlo, inténtalo de nuevo la próxima vez, sigue avanzando.

Apreciar las pequeñas cosas

Tómate tiempo para celebrar los pequeños éxitos y no esperes que los cambios se produzcan de la noche a la mañana.

Lo tuyo es a largo plazo. Los pequeños cambios se van sumando con el tiempo, y se van acumulando. Al igual que el dinero invertido en la bolsa, tu poder aumentará con el tiempo. Las ganancias a corto plazo pueden ser fáciles de conseguir, pero pueden perderse rápidamente si no las mantiene.

Intenta llevar un diario con los cambios físicos.

Trabaja a un nivel que sea fácil de mantener

Si estás en el nivel 10 en cada entrenamiento, te será difícil mantenerlo.

Esto no significa que nunca debas esforzarte al máximo y llevarte al límite.

Sin embargo, la mayoría de tus entrenamientos deben ser razonables y no hacerte sentir tan mal que necesites descansar para recuperarte.

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Mantén la sencillez

Céntrate en el aprendizaje de habilidades básicas.

Intenta no dejarte tentar por cada programa o ejercicio nuevo que veas, limítate a lo que funciona.

Esto no significa que tengas que repetir los mismos ejercicios sin parar, pero mezclar constantemente las cosas no hace que se progrese.

Sé fiel a ti mismo

Si nunca has levantado pesas, pide consejo a un amigo o a un experto en fitness. No intentes asumir un reto para el que no estás físicamente preparado. Ve aumentando el nivel de exigencia

Comprende dónde estás y acéptalo

Lo que hacías en el gimnasio hace diez años puede no ser relevante hoy.

Si está superando una lesión o volviendo al gimnasio después de un largo descanso, empieza donde estás ahora, no donde estabas. Sé honesto y paciente contigo mismo.

Muévete todos los días

No todos los entrenamientos tienen lugar en el gimnasio.

Sal a caminar, monta en bicicleta, haz una sesión de ejercicios o simplemente mantente activo, todo suma.

Afinidad

Estar con personas afines ayuda mucho a mantenerse en el camino correcto.

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Por último, presta atención a tu nutrición y recuperación

El ejercicio es solo una parte de la ecuación. No descuides todo lo demás.

Lo más importante que hay que recordar cuando se busca una rutina de fitness sostenible es mantenerse flexible. Recuerda que la vida te planteará retos y tendrás que adaptarte. Si te ciñes a las prácticas anteriores, tendrás las herramientas necesarias para poder manejar lo que la vida te depare.

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